La situación familiar de Aislinn Derbez y la separación
Recientemente, el mundo del espectáculo fue sorprendido por noticias relacionadas con la familia de Aislinn Derbez, específicamente tras el lamentable fallecimiento de su madre, Gabriela Michel. En medio del duelo, han surgido declaraciones importantes por parte de Jorge Alberto Aguilera, conocido locutor y quien fuera esposo de la actriz de doblaje. Se ha dado a conocer que, contrario a lo que se pensaba públicamente, la pareja ya no se encontraba junta al momento del deceso. Esta información fue compartida en una entrevista donde se detalló que la separación había ocurrido meses atrás, manteniéndose bajo estricta privacidad por respeto al núcleo familiar.
El fin de una etapa matrimonial
Según lo expresado por el entorno cercano, la ruptura entre el «Señor Aguilera» y la madre de la actriz no se debió a conflictos abruptos, sino a una transformación de la relación. Fue revelado que ambos decidieron tomar caminos distintos en cuanto a la convivencia, optando por vivir en domicilios separados aproximadamente un año y medio antes de la tragedia. A pesar de esta distancia física, se ha enfatizado que el vínculo no se rompió desde el enojo; por el contrario, se transformó en una sólida amistad. Ambos continuaron comunicándose y tratándose con el inmenso cariño que construyeron durante décadas de matrimonio.
La relación con las hijas
Es importante destacar el rol que Jorge Alberto Aguilera ha desempeñado en la vida de sus hijas y de su hijastra. Aunque el matrimonio concluyó en términos románticos, el lazo paternal ha sido preservado. Aguilera ha manifestado en diversas ocasiones que, para él, Aislinn Derbez es como una hija propia. Habiéndola criado desde pequeña tras la separación de Gabriela con Eugenio Derbez.
Esta dinámica de respeto y cordialidad fue mantenida hasta los últimos momentos, demostrando que la prioridad siempre fue el bienestar emocional de la familia. La discreción con la que se manejó la separación evidencia el profundo respeto que existía entre las partes involucradas, quienes prefirieron guardar el luto. Y los detalles íntimos lejos de los reflectores hasta que fuera el momento adecuado para hablar.
